Saltar al contenido
Divina Oración

Salmos De Protección

PODEROSOS SALMOS DE PROTECCION

El salmista David fue un hombre que en todo momento puso su confianza en Dios. Y eso lo podemos comprobar en muchos de los poemas escritos. Sobre todo, en los salmos de protección donde clama a Dios con total convicción de que Dios le responderá.

Además, podemos notar que esa confianza absoluta se debe a la manera que tenía para relacionarse íntimamente con Dios como Padre. A continuación, te presentamos algunos salmos de protección en la biblia, que te ayudarán a sentir seguridad en todo momento.

Post sugerido: Salmos de esperanza y fortaleza católicos

En Paz Me Acostare

(Salmos 4:8) “en paz me acuesto y asimismo duermo, porque el señor me hace vivir confiado”
en paz me acostare

Este salmos de protección nos enseña que, para terminar el día en paz, y dormir seguros. Es necesario tener a Dios presente durante todo el día. Pedir su intervención en medio de cualquier circunstancia difícil que podamos enfrentar.

Tal como lo hizo el salmista David cuando se sentía injustamente acorralado. De modo que, este salmos de protección, nos inspira a sentir esa confianza plena, y esa paz que solo Dios puede dar.

Mi Socorro Viene Del Señor

(Salmos 121) a los montes alzare mis ojos; ¿de dónde ha de venir mi socorro? Mi socorro proviene del señor, creador del cielo y la tierra. No dará tu pie al resbaladero, ni se dormirá el que te guarda. Jamás duerme ni se adormece el que cuida a Israel. Jehová es quien te cuida; Jehová es tu sombra a tu mano derecha.
en paz me acostare

El salmo 121 uno de los salmos de protección que nos enseña, que, en medio de las circunstancias difíciles. No debemos enfocarnos en el problema. Sino buscar la presencia del señor y reconocer que nuestra ayuda proviene de él. Ya que este es un acto de humildad, que provocará el mover de Dios en nuestra vida.

Al inicio vemos como el salmista tenía presente un lugar donde podía mirar con seguridad de que recibiría ayuda. Esto habla claramente de que debemos aprender a tener una relación íntima con Dios por medio de la oración.

Al Abrigo Del Altísimo

(Salmos 91:1) El que habita al abrigo del Altísimo, se acoge bajo la sombra del todopoderoso. Yo le digo al Señor “mi refugio eres tú, mi fortaleza, el Dios en quien confío”.

El salmo 91 es uno de los salmos más conocidos de David, y en el primer versículo de este, nos damos cuenta de que podemos descansar en las promesas de Dios. Para esto es necesario conocer de su palabra y conocer cuál es su voluntad en nuestras vidas. Para declarar sus promesas de protección ante cualquier ataque del enemigo

El Señor Me Libró De Mis Temores

(Salmos 34) “Ore al señor, y él me respondió; Me libró de todos mis temores. Los que buscan su ayuda estarán radiantes de alegría; Ninguna sombra de vergüenza les oscurecerá el rostro.”
salmos de protección - El Señor Me Libró De Mis Temores

Este salmo de protección, lo escribió David en un momento que estaba siendo perseguido por el rey Saúl y sus oficiales. Fue para él un momento de gran angustia, en el cual tuvo que refugiarse en una cueva para poder salvarse. Estando allí, David lleno de temor eleva su oración a Dios, pidiendo ser libre de sus enemigos.

Tal vez, hay situaciones en nuestra vida donde el alma está colapsada por el miedo y la angustia. Y podemos llegar a pensar que no hay una salida. Este salmo nos enseña que cuando oramos a Dios en medio de la angustia él nos responde. Y además nos muestra inmediatamente el camino que debemos seguir.

Mi Buen Pastor

(Salmos 23:3) El Señor es mi pastor; tengo todo lo que necesito. Me hará descansar en lugares de finos pastos; Junto a aguas tranquilas me guiará. Fortalecerá mi alma; Me conducirá por sendas de buen nombre. Aunque ande en pasos de sombra de muerte. No temeré ningún mal, porque tú estarás conmigo.
salmos de proteccion

En el salmo 23 David se refiere a Dios como el buen pastor que cuida de sus ovejas. Lo cual vemos que David, reconoce ser uno de sus rebaños. También podemos notar, que el pastor lo es todo para su vida. Y que como su padre celestial le brinda su protección y además suple todas sus necesidades.

Así como David dependía de Dios para todo, porque lo veía como su buen pastor. Así también, nosotros debemos considerarnos parte de su rebaño. Y aprender a confiar plenamente en que nuestro pastor cuida de nosotros en todo momento.

En Mi Angustia Invoqué Al Señor

(Salmos 18:4-6) Los lazos de la muerte me envolvieron; los torrentes destructores me abrumaron. Los lazos del sepulcro me confundieron, y ante las trampas de la muerte me encontré. En mi angustia invoqué al señor; y desde su templo, escuchó mi clamor.
en mi angustia invoque al señor

En el salmo 18 vemos una vez más al rey David siendo libre de sus enemigos, luego de haber clamado a Dios. Cuando estuvo al borde de la muerte. Esto nos enseña, que no importa que tan grande o difícil pueda parecer el problema ante nuestros ojos.

Si mantenemos nuestra fe puesta en el señor, ninguna circunstancia será más grande que su poder. solo basta con llamarle, sin importar el lugar donde estemos. ya que desde su santo templo él escuchó nuestro clamor. Como lo dice este salmo de protección.