El Rosario al Divino Niño Jesús es una devoción importante dentro de la Iglesia Católica. Es una forma de conectarse con el amor y la humildad de Jesús, y de pedir su protección y ayuda en momentos de necesidad. Esta devoción ofrece muchas bendiciones a los que creen en ella, y es una forma poderosa de profundizar en la fe católica.
A través de la meditación en los misterios de su infancia, los católicos pueden conectar con el amor y la humildad que el niño Jesús representó en su vida terrenal. Esta devoción también es una forma de pedir ayuda y protección al Divino Niño en momentos de dificultad.
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¿Cómo se reza el Rosario al Divino Niño?
El Rosario al Divino Niño se reza de una manera similar al Rosario tradicional, pero en lugar de meditar sobre los misterios de la vida de Jesús, se medita en los misterios de la infancia de Cristo. Se comienza con el Credo, seguido de un Padrenuestro y tres Avemarías.
A continuación, se medita en los misterios de la infancia de Cristo, que incluyen el nacimiento de Jesús, la visita de los Reyes Magos, la presentación de Jesús en el templo y la huida a Egipto. Después de cada misterio, se reza un Padrenuestro, diez Avemarías y un Gloria. Al final del Rosario, se reza una oración especial al Divino Niño en la que se le pide su amor y protección.
Rosario al Divino Niño Jesús
A continuación te dejamos el paso a paso con todas las oraciones necesarias para poder rezar de manera correcta el Rosario al Divino Niño Jesús. Recuerda hacerlo con fe y amor y tus favores serán concebido.
¿Cuál es la historia del Rosario al Divino Niño Jesús?
El Rosario al Divino Niño Jesús es una devoción relativamente joven en la Iglesia Católica. Aunque no hay una fecha exacta de su origen, se cree que comenzó a ganar popularidad en Colombia a principios del siglo XX. La figura central de esta devoción es el Divino Niño Jesús, una imagen de Jesús como un niño sonriente y tierno. Este niño Jesús es una representación de la humanidad de Cristo, ya que fue concebido y nacido como cualquier otro niño en el mundo. A través de esta devoción, los católicos buscan conectar con este lado humano de Jesús y sentir su amor y misericordia.
El Rosario al Divino Niño se reza de una manera similar al Rosario tradicional, pero en lugar de meditar sobre los misterios de la vida de Jesús, se medita en los misterios de la infancia de Cristo. Se comienza con el Credo, seguido de un Padrenuestro y tres Avemarías. A continuación, se medita en los misterios de la infancia de Cristo, que incluyen el nacimiento de Jesús, la visita de los Reyes Magos, la presentación de Jesús en el templo y la huida a Egipto. Después de cada misterio, se reza un Padrenuestro, diez Avemarías y un Gloria. Al final del Rosario, se reza una oración especial al Divino Niño en la que se le pide su amor y protección.