Oración a la Virgen del Valle

Virgen del Valle, la de entornados ojos, mi alma expresa el más puro y sincero amor a tu santa presencia. Tuyo es mi corazón amada mía, mi vida está en tus manos bondadosas y llenas de luz. Madre, en tu pecho sagrado me refugio, como niño tímido, emocionado y en mis manos llevo las flores del cariño.

Yo te recuerdo cuando en mi inocencia tus dulces ojos se encontraban con los míos. Y al mirarte el faro de tu amor, brillaba sobre mí, y los días se me hacían más claros. Y así como los niños en su inocencia, yo hacía plegarias sin susurrar.

Rogando en mis sollozos ante el trono del magnífico Dios. Entre espinas y cardos, después de largos sueños, mis pasos te siguieron, y con tus manos de nardos, tú me das aliento. Un día mi ilusión en un cáliz de oro, de fragancia de lirios se llenaron mis manos. Mis delirios de amor a la virgen del Valle.

¡Oh! Santísima virgen del valle, ante ti venimos a implorarte por protección, ampáranos en todo momento. Y que tu infinita misericordia nos rodee y nos libre del mal, guía nuestros pasos amada virgen del valle. Que tu dulce presencia nos ayude, nos fortalezca y nos acompañe en todo lugar.

Intercede ante el padre virgen santísima, por mi familia y por mi vida, que tu paz reine en nuestros corazones. Protégenos de la envidia, de las malas intenciones, de las injusticias, de la enfermedad y todo lo que quiera destruir mi hogar. Coloca un escudo protector sobre nuestras vidas, escucha nuestra oración virgen del valle, amén.

Amada madre santísima, fortalecemos nuestra fe por medio de esta oración virgen del valle, pues sabemos que en tiempos difíciles la fe en nuestro señor es la que nos salva, es la que nos mueve y nos levanta. Por eso, en este tiempo, queremos confiar más que nunca en sus promesas, y activar por medio de esta oración su bendición. 

Queremos en este día virgen del valle que nos ayude a vivir por fe, que podamos en este tiempo descansar en las promesas de nuestro señor. La palabra dice que por la fe el justo vivirá. Y hoy creemos que su palabra se cumple en nuestras vidas, en el nombre de Jesús, amén.

Santa señora del valle, en este día venimos delante de ti para agradecerte por las bendiciones que nos concedes. Te agradecemos por tu divina presencia y por los favores que recibimos cuando imploramos tu nombre. gracias por la dicha que nos das en bendecirte y honrarte.

Agradezco a la virgen santísima, por las alegrías y el gozo que nos da tu luz infinita. Por tus amorosas manos llenas de misericordia, por responder nuestras oraciones siempre acudimos a ti. agradezco por ser nuestra madre protectora, la que nos defiende de los peligros que nos rodean. Amén.