Las Oraciones a la Virgen María, han iluminado la vida de millones de personas por diversas partes del mundo. Así como también, han sido de gran ayuda para el crecimiento espiritual de los creyentes. Pues, quienes las realizan pueden perseverar en ellas, ya que estas se adaptan a todas las necesidades, tanto física como espiritual.
La Virgen María ha realizado miles de milagros a quienes se acercan a ella en oración. Y al día de hoy, son muchas las personas que rinden gran devoción hacia su imagen. Por el gran amor que ha mostrado hacia la humanidad como madre de nuestro señor Jesucristo.
Dicho esto, te presentamos las oraciones más populares a la Virgen María, que puedes realizar en cualquier momento.
Post sugerido: Oraciones a la Virgen de Loreto
Oración por la Familia a la Virgen María
Madre tú que fuiste enviada a brindar protección a la familia, te pido que protejas mi hogar. Y que ninguno de mis familiares padezca. Guárdanos en tu fiel amor amada y que podamos sentir la seguridad y la confianza de tu santa presencia. Por los siglos de los siglos, amén.
Oración Milagrosa a la Virgen María
Virgen Amada, desde tu santo templo nos consuelas, nos abrazas y nos das seguridad. Tus oraciones nos salvan de las injusticias que nos rodean. Tu fiel amor y compasión, nos salva del temor y nos ayuda, en los días más difíciles que enfrentamos. Gracias a ti hoy podemos creer en un mejor futuro. Amén.
Oración Para Casos Difíciles a la Virgen María
En Oración Virgen María, pido que me ayudes a no desmayar, a no perder las esperanzas. Dame la fe y la fuerza que necesito para salir de este problema y alcanzar el milagro que necesito. No permitas que ceda ante las tentaciones que se me presenten. Guíame amada virgen, a tomar las decisiones correctas, en este caso difícil. Dame la sabiduría y el discernimiento para rechazar todo lo que no me ayuda a avanzar. Se tu mi guía y luz, hoy y siempre. Amén.
Oración para Bendecir a la Virgen María
Bendito tu santo nombre Virgen María, en el cual nos refugiamos y nos inspiramos cada día. Eres un ejemplo a seguir, fuiste la mejor de las discípulas. Eres admirada por los hombres y en el cielo reconocida por la gran labor que desempeñamos aquí en la tierra como madre de nuestro Jesucristo. Bendita eres Virgen María, por los siglos de los siglos. Amén.