La «Oración a San Maximiliano Kolbe» es una plegaria dirigida al santo polaco que ofreció su vida en el campo de concentración de Auschwitz durante la Segunda Guerra Mundial. Esta oración busca obtener la ayuda y protección de San Maximiliano Kolbe en momentos de dificultad y también para ser inspirados por su valentía y sacrificio. Es una invitación a seguir su ejemplo de amor y entrega hacia los demás, confiando en su intercesión para obtener las gracias necesarias en la propia vida.
te alabamos y te bendecimos por el don de la vida
y por los santos que nos has dado como ejemplo
para seguir en los caminos de la santidad.
Hoy nos dirigimos a ti con fervor y esperanza,
implorando tu favor y la intercesión de San Maximiliano Kolbe,
nuestro valiente sacerdote y mártir.
San Maximiliano, fiel seguidor de Cristo,
tú que entregaste tu vida por otro prisionero en Auschwitz,
te pedimos que intercedas por nosotros ante el trono de Dios.
Ayúdanos a ser valientes en nuestra fe,
a amar y servir a los demás sin reservas,
y a ser testigos de la esperanza en un mundo lleno de sufrimiento.
Te agradecemos por tu ejemplo de amor y sacrificio,
por tu devoción a la Virgen María y tu entrega total a Cristo.
Rogamos que nos concedas la gracia de imitar tus virtudes,
especialmente tu amor por el prójimo y tu confianza en la providencia divina.
San Maximiliano, nuestro protector y amigo,
te pedimos que nos guíes en nuestra vida diaria,
que nos ayudes a discernir la voluntad de Dios,
y que nos fortalezcas en nuestra lucha contra el pecado.
Intercede por nosotros en nuestras necesidades,
tanto físicas como espirituales,
y danos la gracia de perseverar hasta el final.
Concédenos la fortaleza para resistir las tentaciones,
la humildad para reconocer nuestros errores,
y la sabiduría para crecer en santidad.
San Maximiliano, tú que comprendiste el poder del amor,
enséñanos a amar a Dios y a nuestros hermanos con todo nuestro ser.
Ayúdanos a ser generosos en nuestros dones
y a ofrecer nuestras vidas al servicio del Evangelio.
Infunde en nosotros la pasión por la verdad,
la compasión por los necesitados,
y el celo por la conversión de los pecadores.
San Maximiliano, mártir de la caridad,
ruega por nosotros y por todos aquellos que necesitan tu ayuda.
Intercede por aquellos que sufren,
por aquellos que buscan la verdad,
y por aquellos que han perdido la esperanza.
San Maximiliano, santo de nuestro tiempo,
despierta en nosotros el deseo de la santidad,
y ayúdanos a vivir según la voluntad de Dios.
Por Cristo nuestro Señor. Amén.