La bandera salvadoreña, símbolo de identidad y unidad, es un emblema patriótico que representa los valores y el espíritu de El Salvador. La ‘Oración a la Bandera Salvadoreña’ es una poderosa invocación que exalta fervorosamente la grandeza y la historia de nuestra nación. A través de sus palabras inspiradoras, esta oración nos muestra cómo el amor y el respeto hacia nuestros símbolos patrios nos unen como pueblo y nos hacen sentir orgullosos de nuestra tierra.
Oración a la Bandera Salvadoreña
Querido Dios, Padre Misericordioso, hoy nos reunimos ante tu presencia para orar y elevar nuestras plegarias a través de la Bandera Salvadoreña, símbolo sagrado de nuestra nación.
Te pedimos, Señor, que bendigas esta enseña patria que representa la historia, los valores y la identidad de nuestro amado El Salvador. Que su presencia sea siempre un recordatorio de nuestro compromiso con la justicia, la paz y la solidaridad.
En sus colores azul y blanco vemos reflejado el cielo y las nubes, como símbolo de tu infinito amor y misericordia hacia cada uno de nosotros. Que nos inspire a vivir en armonía, promoviendo la unidad y el respeto entre hermanos.
Padre Celestial, te pedimos que guíes a nuestros gobernantes y a todos aquellos que tienen la responsabilidad de tomar decisiones en nuestra nación, para que lo hagan con sabiduría, justicia y transparencia. Que la Bandera Salvadoreña sea un recordatorio constante de su compromiso con el bienestar de cada salvadoreño.
Te pedimos, Señor, que bendigas a todos aquellos que han entregado su vida en defensa de nuestros ideales y libertades. Que su sacrificio no sea olvidado y que su ejemplo nos motive a trabajar por un El Salvador mejor cada día.
Oh, Madre María, Reina de la Paz, te encomendamos a nuestra nación y a todos sus habitantes. Intercede por nosotros ante tu Hijo, para que nos conceda la gracia de vivir en justicia, fraternidad y amor.
Que en cada celebración cívica y ante la presencia de la Bandera Salvadoreña, recordemos nuestra responsabilidad como ciudadanos, comprometiéndonos a construir un país próspero, en el que reine la paz y el respeto mutuo.
Confiados en tu providencia y gracias a la intercesión de la Bandera Salvadoreña, te pedimos, Señor, que bendigas a El Salvador y a todos sus hijos. Amén.