Nadie desea saber más de nosotros, que nuestro Padre Celestial. Y, sabemos que es por medio de la oración donde podemos establecer una comunión con Él. Sin embargo, para esto, es necesario saber como aprender a orar a Dios. Ya que, hay quienes se limitan a hacerlo por ciertos paradigmas que tienen en cuanto a la oración.
Cuando aprendemos a relacionarnos con Dios correctamente a través de la oración, vamos a querer orar a Dios más seguido. Dado que, ya no estaremos orando como un simple hábito, o por costumbre. Sino que estaremos desarrollando una comunión genuina con Dios como padre.
No obstante, por medio de esta oración podemos expresar nuestras peticiones, y pedir ayuda en nuestras debilidades con total confianza. Pero, si no sabes cómo empezar a orar a Dios, a continuación, te enseñamos algunos pasos de cómo puedes hacerlo.
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Conoce El Propósito De La Oración
Lo primero que debemos de tener en cuenta al momento de aprender a orar a Dios, es conocer el propósito de la oración. pues existen diferentes motivos por el cual oramos, ya sea para glorificar el nombre de Dios, para pedir ayuda, o para ser transformados y perdonados por él.
Sin embargo, aunque todo esto es parte de la oración, debemos saber que la oración es el mayor privilegio que podemos tener. Ya que, por medio de esta, lograremos establecer una relación cercana con Dios como nuestro Padre.
De modo que, entendiendo esto, podemos sentirnos con total libertad de hablar de cualquier cosa y en cualquier momento que lo necesitemos. Sin embargo, para mantener un orden al momento de orar a Dios podemos apoyarnos en el libro de mateo 6: 9-13. Allí Jesús nos da algunas instrucciones de cómo orar al padre.
Orar Con Sinceridad
La sinceridad en la oración es algo que debemos de tener en cuenta para aprender a orar a Dios. Pues sabemos, que nos vamos a dirigir a un ser supremo que conoce todo de nosotros. Por esto, es necesario que oremos desde la razón. Es decir, que seamos conscientes de lo que vamos a expresarle a Dios.
Cabe mencionar, que existen personas que al momento de orar suelen usar frases que desconocen, y que no son bíblicas. Usándolas simplemente por costumbres o porque alguien más las dice, y suena bonito.
Está bien, que aprendamos de los demás, que tienen más tiempo practicando la oración a Dios. Pero, debemos de tener cuidado con esto. Para que no sea un obstáculo para orar correctamente. Para esto, es necesario que tengamos basamento bíblico para tener un conocimiento pleno acerca de las promesas de Dios.
Orar Con Versículos De La Biblia
Como antes mencionamos, el basamento bíblico nos ayudará mucho al momento de orar a Dios. pues sin duda es el mejor método para aprender a orar. Cabe mencionar, que orar con versículos de la biblia, no quiere decir que en toda la oración vamos a repetir solamente estos versículos. Pero, si bien es cierto, cuanto más conocemos acerca de la voluntad de Dios en nuestras vidas, mejor vamos a relacionarnos con El.
No hay un orden correcto para que recitemos los versículos bíblicos dentro de la oración, estos se pueden mencionar en cualquier momento. Pero, mientras más leemos la palabra de Dios, más conocimientos tenemos de su palabra. Estas sin duda van a surgir espontáneamente dentro de la oración.
Orar Dando Alabanzas A Dios
Jesús relata en Mateo 6: 9, que la oración debe de comenzar dando alabanzas a Dios. Lo cual es una verdad que tiene gran impacto en nuestras vidas. Ya que, Él debe de ser siempre el único merecedor de nuestra alabanza.
De modo que antes de comenzar a interceder o pedir cualquier cosa a Dios, debemos de comenzar por alabarle. Este es un acto de adoración que ofrecemos a Dios como sacrificio a través de la oración. Leer (Hebreo 13:15)
Esto nos capacita, además, para recibir las respuestas que necesitamos de parte de Dios. Ya que, cuando reconocemos el poder de Dios en la alabanza, alimentamos el espíritu. Para este momento se puede incluir cantos o himnos que honren el nombre de Dios.
Orar Para Dar Gracias A Dios
Dar gracias a Dios en la oración es lo siguiente que debemos de aprender al momento de orar. Este acto, es considerado también como lo más importante que debemos de hacer antes de comenzar a interceder, o pedir cualquier cosa.
Pues, muchas veces, solemos dirigirnos a Dios únicamente cuando necesitamos algo, o para que nos resuelva algún problema. Cuando en realidad, no nos detenemos a pensar en todo lo que debemos agradecer.
Expresar nuestra gratitud en la oración es la muestra de humildad más grande que podemos tener delante de Dios. Ya que estamos reconociendo que dependemos completamente de Él. Por tanto, nuestro orgullo mengua delante de su presencia.
Salmos 51:17 “Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; al corazón contrito y humillado no despreciaras tu oh Dios”.
Orar Para Interceder Por Ti Y Por Los Demás
Teniendo en cuenta los pasos antes mencionados al momento de orar, en esta parte se puede pedir e interceder por los demás. Esto sin duda, es algo que le agrada a Dios. Pues la oración de intercesión se convierte en una oración eficaz que abre inmediatamente las puertas de los cielos sobre nosotros. Y además nos da paz.
En esta parte de la oración, podemos pedir por nuestros amigos, familiares, iglesia, pastores, por la espiritualidad, sabiduría, y todas las cosas que estemos necesitando. Es importante en este punto de la oración, pedirle al Espíritu Santo que nos ayude. Ya que la biblia nos enseña en Romanos 8: 25, que el espíritu santo intercede por nosotros.
Orar Para Pedir Perdón
Finalmente, en esta guía de como aprender a orar a Dios, podemos orar para pedir perdón. Aunque este orden no parezca lógico, la oración que Jesús nos da de ejemplo, en Mateo 6: 13. Vemos claramente que antes de pedir perdón, primero pide el pan de cada día.
Esto sin duda, nos enseña que el amor de Dios por nosotros es más grande que nuestros pecados. Y que, así como un padre no le niega la comida a su hijo aun cuando se haya portado mal. Así es como nos mira Dios a nosotros, con amor de Padre.
Por tanto, al orar debemos relacionarnos con Él de tal forma, que podamos expresarle nuestras necesidades y asimismo nuestras debilidades. Pues Él es fiel para corregirnos sabiamente, Y perdonarnos.